Os cuento, un buen día, por circunstancias que no vienen ahora mismo al caso, me encontré en la cocina con varios kilos de limones y algo así como un kilo de limas… Ni qué decir que me puse como loca a hacer bizcochos, tarta de limón… en fin, un no parar, y por supuesto, tenía que hacer sí o sí una buena mermelada.
Esta receta es tremendamente sencilla, y es perfecta para tomar en desayunos y meriendas, y también para acompañar pescados (en serio, probadla porque os va a sorprender y hace que cualquier pescadito hervido luzca de otra manera 😉 ).
Por cierto, como podéis ver en la foto, le dejé unos trozos bastante grandes porque quería que tuviera esa textura, con las pieles confitadas, pero si os gusta más uniforme y suave, solo tenéis que picarlo un poco más en el thermomix en el segundo paso.
Ingredientes para 1 kg. de mermelada:
- 500 gr. de limones
- 150 gr. de limas
- 500 gr. de azúcar
Dificultad: Nula
Tiempo: 30 minutos
Precio: 3€
Preparación:
En primer lugar pelamos (mejor con un pelador) los limones y las limas y nos quedamos solo con la piel, tiramos toda la parte blanca que amarga (según el tipo de cítrico, puede ser casi inexistente o bastante gruesa).
Ponemos en el vaso las pieles junto los limones y limas cortados en cuartos. Picamos durante 10 segundos a velocidad 5 (ahí es donde tenemos que ver qué textura queremos que tenga), y agregamos el azúcar.
Programamos 20 minutos, temperatura varoma, velocidad 1. En los últimos minutos es bueno quitar el cubilete para dejar que se evapore un poco el líquido, que el limón tiene mucha agua, y así quedará un poco más espesa la mermelada.
Al terminar el programa, colocamos en caliente la mermelada en los botes (luego es más difícil de manipular) y los dejamos destapados hasta que se enfríe… ¡¡y listos para darnos un cítrico homenaje!! 🙂