Alitas de pollo con salsa Ponzu (sous vide)

Receta sous vide de alitas de pollo con Ponzu

Cómo preparar alitas de pollo en salsa Ponzu

Ya no llevo la cuenta de cuántas recetas de alitas de pollo tengo en el blog, ya sabéis que me encantan, y me parecen súper versátiles, así que no paro de buscar nuevas formas de prepararlas. La receta de hoy es un poco más laboriosa de lo normal, pero os van a quedar unas alitas de cine.

La salsa Ponzu recuerda un poco a la soja, pero es mucho más sabrosa y tiene toques cítricos. Si os fijáis, suele ser ya frecuente encontrarla junto a la salsa de soja en la sección de comida oriental de los supermercados, así que no creo que tengáis problema en haceros con una botella. Por lo demás, la técnica sous vide consiste en sellar al vacío los alimentos y cocinarlos durante periodos largos de tiempo, sumergidos en agua a una temperatura constante, y por lo general, baja. Se puede hacer «a lo casero», con bolsas de congelación sujetas en pinzas a los bordes de una cazuela con agua que no llega a hervir (con lo que no sabéis exactamente el tiempo, porque no tenéis controlada del todo la temperatura) o bien haceros con algún aparato como el Anova, o con un horno sous vide (yo tengo el de Lidl) o un ronner profesional (un poco caro, eso sí). Opciones hay muchas, yo os recomiendo empezar con el horno de Lidl porque es barato y funciona muy bien. No lo tienen siempre, así que estad pendientes de las ofertas y promociones.

La ventaja de esta técnica es que se respetan las propiedades de los alimentos, que además quedan tiernos y llenos de sabor. Echadle un vistazo a este pedazo de blog, en el que os explican fantásticamente en qué consiste y cómo se pueden llevar a cabo las recetas. Aviso, es más sencillo de lo que parece y crea adicción, es la clave de la cocina de muchísimos restaurantes… ahí lo dejo 😉

Vamos con la receta:

Ingredientes para 4 personas:

  • 20 alitas de pollo partidas
  • 20ml de salsa Ponzu
  • 3 cucharadas de azúcar moreno
  • 2 cucharadas de jengibre en polvo
  • 1 pellizco de sal

Dificultad: Media

Tiempo: 6 horas aprox. (más el marinado)

Precio: 8€

Preparación:

En primer lugar, introducimos todos los elementos dentro de una bolsa de vacío, y los sellamos (las envasadoras son baratitas, yo conseguí la mía con puntos en el banco 😉 ). Llevamos a la nevera al menos durante un par de horas (yo las suelo dejar toda la noche).

Mientras, llenamos el horno sous vide con agua y lo programamos a 73º. Sumergimos la bolsa completamente en el agua y programamos 4 horas y 30 minutos.

Cuando queden 20 minutos para terminar, calentamos el horno tradicional a potencia máxima (grill) y vamos colocando papel de horno sobre la bandeja.

Sacamos la bolsa del sous vide, la cortamos con una tijera y guardamos por un lado las alitas, y por el otro lado, la salsa. Colocamos el pollo sobre la bandeja ya preparada y la introducimos en el horno para que se dore.

Con la salsa formaremos un jarabe espesito, y para eso solo tenemos que llevarla a ebullición suavemente en una cazuela pequeña. Removemos de vez en cuando para que no se pegue, y cuando espese un poco, la retiramos del fuego y reservamos.

Ya podemos sacar las alitas del horno para emplatarlas en una bandeja. Regamos con la salsa que hemos caramelizado (también se pueden pintar con un pincel para darles brillo) y las llevamos a la mesa.

Son un escándalo de buenas, crujientes y doraditas por fuera, con la carne súper tierna que se separa del hueso… y no os cuento cómo queda la salsa, porque es de hacerle la ola… De guarnición, lo que más os guste, un arroz basmati, ensalada, unas patatas fritas para darles un toque informal, ¡hay múltiples posibilidades, disfrutad!