Bizcocho de violetas (Thermomix)
Una de las cosas que más me gustan en este mundo son las violetas (ya, ya lo sé, también soy fan fatal de la canela, el pimentón, el azahar, las cerezas… en fin…). Total, que tenía unos caramelos de violeta guardados para esos días de lluvia en los que necesitamos un chute extra de algo bueno y me dije… Esto lo transformo yo en un bizcocho de esos de convertir los lunes en gloria bendita, ¡y dicho y hecho! Pulvericé los caramelos y me puse a la faena… ¡¡vamos a darle alegría a las mañanas!!
Bizcocho para 4 personas:
- 1 yogur de fresa
- 1 medida de yogur de aceite de oliva
- 2 medidas de yogur de caramelos de violeta pulverizados
- 3 medidas de yogur de harina bizcochona
- 3 huevos
- 1 sobre de levadura química
- 1 cucharada de mantequilla, y 1 cuchara de harina extra
- Opcional: 3 gotas de esencia de ron, o 1 cucharadita de esencia de violeta concentrada
Dificultad: Nula
Tiempo: 40 minutos
Precio: 4€
Preparación:
Esto no puede ser más fácil, lo único que hay que seguir es el orden de los ingredientes… En primer lugar, ponemos los huevos en el vaso, empezamos a batir a velocidad 2, y vamos agregando el azúcar poco a poco por el bocal (el azúcar, por cierto, son los caramelos de violeta pulverizados previamente. Se trata de poner los caramelos en el vaso, programamos el turbo unos 5-10 segundos, y listo el azúcar glas de violetas). Le damos unos 10 segundos a velocidad 5 y volvemos a bajar a velocidad 2.
Añadimos ahora el aceite por el bocal, programando el vaso a velocidad 5 … al término, agregamos el yogur, esperamos a que esté todo bien integrado y rematamos con la harina tamizada y la levadura.
Toca ahora poner un poco de mantequilla en un molde de bizcocho, y lo enharinamos con la cucharada extra de harina que hemos reservado. Volcamos dentro la mezcla y lo llevamos al horno (precalentado previamente a 180º). Al cabo de aproximadamente 30 minuto tendremos el bizcocho doradito por arriba y jugoso por dentro.
Al ser un bollo casero, dura en perfecto estado durante 3-4 días, manteniendo su frescura si lo guardamos en papel film o papel de aluminio. Fantástico para acompañar un helado en la merienda, o como acompañante de un buen café o cola-cao mañanero… ¡a disfrutar!